La alopecia femenina tiene solución

Siempre que hablamos de alopecia la asociamos con el género masculino. Sin embargo es un problema que afecta alrededor del 30% de las mujeres de entre 40 y 60 años. Debido a la educación que recibimos desde pequeños otorgamos gran importancia al pelo, sobre todo las mujeres que lo cuidan y lo miman toda su vida.

Generalmente la principal causa de alopecia en mujeres es la alopecia androgénica. Esta se produce por una alteración en los componentes genéticos en la que se transforma de forma excesiva la testosterona (sí, las mujeres también la tienen pero en pequeñas cantidades) en drihidrotestosterona (conocida como DHT) por culpa de un exceso de la enzima que cataliza esta reacción. La alopecia femenina se ha visto incrementada en los últimos años debido al aumento del estrés y a una mala alimentación.

Esta enfermedad acarrea muchos problemas psicológicos en las personas, incluso más en las mujeres que en los hombres.  Algunos de ellos son:

Cambios en la percepción de una misma

Por estereotipos muy arraigados en la sociedad las mujeres son educadas para estar siempre perfectas y eso depende, en gran medida, de la imagen exterior que tengan. Por lo que al verse con menos pelo e incluso zonas con calvicie dejan de gustarse, se empiezan a sentir inseguras y comienzan a tener pensamientos insanos acerca de ellas mismas y de como los demás las puedan llegar a juzgar. Afectando directamente en la autoestima de la persona y ocupando casi el 100% de su pensamiento.

Poca aceptación social

Los estereotipos de género aún siguen muy arraigados en la sociedad actual. La mujer siempre ha de estar perfecta para gustarle a los demás. Por lo que, en algunos casos, al ver a una mujer con poco pelo o calvicie se tiende a juzgarla y menospreciarla. Incluso reciben menos apoyos y muestras de ayuda que los hombres cuando sufren esta enfermedad.

Mayor frustración

La inversión económica que se realiza en tratamientos para intentar solventar este problema genera una gran frustración y estrés al no obtener los resultados esperados. Muchos de los tratamientos que se pueden obtener en las farmacias no dan la repuesta esperada debido a que la alopecia, por desgracia, no se puede curar.  Asimismo, esta situación que se genera de estrés y frustración índice directamente con el aumento de la pérdida de pelos lo cual vuelve a generar más estrés dando comienzo a un círculo vicioso.

Preocupación por su vida diaria

Muchas de las mujeres que sufren alopecia tienen una gran preocupación por cómo les puede afectar esto en su vida diaria. Temen que la puedan echar del trabajo por no dar la imagen deseada, tienen miedo a no gustarle a su pareja y resultarle atractiva, e incluso tienen miedo de que la propia familia no la apoye en un proceso tan delicado.

Ante una situación como la alopecia femenina es normal sentir todo tipo de miedos, pero debemos pensar que la gente que nos rodea y nos quiere nos va a apoyar ante esta situación. Además si estas cansada de probar todo tipo de tratamientos tienes que acudir a Capilae, una de las mejores y más especializadas clínicas en tratamientos efectivos de alopecia.

 Sara Vigil Iglesias