Existen
zapatos que representan un riesgo para la buena salud de los pies según explica
la podóloga Jacqueline Sutera.
En
Perú, uno de los calzados más comúnmente usados son las ballerinas. Podólogos expertos en Lima advierten que el uso frecuente de este calzado puede originar
desplazamiento del talón, por un sobre esfuerzo derivando en fascitis plantar,
y en menor grado callosidades y uñeros.
Tipo de calzado y nivel de riesgo.
Riesgo bajo.
1.
Botas
de agua. Fabricados con materiales gruesos, como plástico y polipiel, que
no permiten la transpiración natural del pie. Puede ser causante de hongos,
verrugas y ampollas. Como punto a favor son que ofrece buen soporte y amortiguación
durante la marcha.
2.
Zapatillas
para correr: Este tipo de calzado solo responde positivamente a su función principal
correr; en caso que se utilice para caminar diariamente ocasiona lesiones de estrés
en la zona del talón.
3.
Zapatillas
de lona: Son las zapatillas más usadas por adolescentes y jóvenes. Del tipo
Converse y Vans. Fabricadas de lona son flexibles e ideales para personas que
sufren de juanetes y dedos en martillo.
Sin
embargo, su suela es muy plana y puede ocasionar inflamación, tendinitis, dolor
en el talón y en casos extremos fracturas por estrés.
Riesgo medio.
4.
Ballerinas.
Este calzado no ofrece punto de apoyo ni amortiguación al ser demasiado plano y
flexible, por lo que el musculo trabaja más duro. La suela plana puede ser
perforada fácilmente por un objeto externo durante la marcha.
5.
Botines
con taco. Los botines al igual que las botas ofrecen un grado de
estabilidad al tobillo. En el caso de los botines sus tacos son moderados, que
no resbalan fácilmente en un piso húmedo. A pesar de esto los especialistas no
recomiendan el uso de botines en personas que tienen pie cavo.
6.
Taco
chino o zapatos con plataforma. Este tipo de calzado desplaza el cuerpo
ligeramente hacia adelante. Como punto a favor, el talón obtiene un mayor
soporte favoreciendo el equilibrio.
El uso diario de este tipo de calzado puede derivar en una compresión
de los nervios, aparición de juanetes y en casos severos fracturas en la parte
media del pie.
Riesgo alto o elevado.
7.
Sandalias
también conocidas como hawainas o chanclas. Pensadas para el uso diario este calzado tiene
una suela plana sin proporcionar soporte al arco del pie o amortiguación en la
pisada.
No están recomendadas en personas que tienen tendencia a la hinchazón
de pies o padecen varices.
8.
Botas
largas con taco alto / zapatos con taco aguja. Estéticamente son muy
favorecedores para la figura femenina, estilizando las piernas. Sin embargo, a
nivel anatómico es como caminar en punta de pie, y mientras más alto sea el
taco, más se sobrecarga la parte delantera del pie lo que puede derivar en
juanetes, dolor y uñeros.
Si el modelo del calzado es en punta, los dedos se comprimen y
la circulación se limita.
Para prevenir una posible lesión en el pie y saber qué tipo de
calzado es el más apropiado se sugiere consultar a un podólogo que pueda
realizar un diagnóstico identificando el tipo de pisada y detectar alguna lesión
que interfiera con la buena funcionalidad y equilibrio del pie.
En
Lima, existen clínicas podológicas especializadas que utilizan tecnología láser
para corregir lesiones frecuentes ocasionadas por una mala elección del
calzado.
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