Tips de salud para quienes trabajan frente a ordenadores

El trabajo de muchos implica estar sentados frente a sus computadoras, llenado informes o creando nuevos archivos para el correcto funcionamiento de una producción. Sin embargo, también debemos tomar en cuenta que esta labor es igual de agotadora  que formar parte del equipo de una excavación minera. ¿La razón? Nuestro cuerpo se daña al adquirir una postura permanente.

Y hablando de posturas, estudios médicos dicen que nuestra mala costumbre de encorvar la columna mientras  se trabaja frente a una computadora podría desencadenar lesiones gravísimas a nivel muscular y óseo. Sí. No estamos alejados de tener los mismos problemas de salud que atacan a un deportista. De no cuidarnos, tendríamos que visitar a un traumatólogo antes de lo que imaginábamos, además de gastar dinero adicional en terapias y medicamentos.

 El asiento en donde te encuentres es tan importante como el sueldo que recibes. Una postura  correcta va de la mano con una buena infraestructura. Asegúrate de tener una silla ergonómica que proteja tus riñones. De lo contrario, tendrás que ir buscando un trabajo que no dañe tu salud. Y es que es indispensable que los empresarios inviertan en la compra de herramientas que les brinden comodidad. Aunque no lo crean, esto aumenta en gran medida los niveles de producción.

¿Qué hay de nuestros ojos? Es importante prestar atención a nuestra salud visual cuando realizamos este tipo de trabajos. Esto incluye usar gafas de la medida correcta  y con sistemas anti –réflex. Además de cerciorarnos que el brillo de la computadora no sea demasiado agresivo para nuestra vista. También sería conveniente pactar una cita médica con un especialista en el área de oftalmología cada seis meses. De este modo, usted podrá trabajar asegurándose de que todo transcurre con normalidad.

¡Sí, a los recreos! Debemos tener en mente que no somos máquinas capaces de realizar trabajos sin tomar un solo descanso. La oficina no tiene que ser tu cárcel. Cada dos horas desplázate por el lugar, estirando todos los músculos que  consideres contraídos. Si te da mucha vergüenza dirígete a los servicios higiénicos, este es el mejor lugar para hacer el ridículo sin que nadie te vea. Además, aliviará la tensión emocional que se produce en tu cuerpo cada vez que asumes una tarea difícil.